lunes, 17 de julio de 2023

Puerta de los Leones (Micenas, Grecia)

 

La experiencia es un grado, indudablemente. En medio de los calores de este verano de 2.023 oigo en las noticias que no sólo nos abrasamos en España, sino que también Italia y Grecia sufren bajo los ardores de la canícula. El informativo que acabo de oír en televisión se hace eco de ello. Y nos cuenta que en Grecia monumentos como la Acrópolis han sido cerrados a las visitas para prevenir las muertes por efecto del calor que han ocurrido en veranos pasados. Mi primer viaje a Grecia (1.983) fue en Enero para que mi hermano, que estaba en 5º de carrera, no perdiera días de clase. De manera que fuimos justo después del día de Navidad y volvimos antes del día de vuelta a las clases. Eso nos permitió pasearnos por Grecia, sus monumentos y museos sin aguantar colas ni sufrir las molestias que implican las masas de turistas, etc. Pude pasear por la Acrópolis absolutamente sola, como primera visitante del día. Era el 1 de enero y yo ya estaba esperando en la puerta cuando llegó un señor con un manojo de llaves y abrió la puerta

Para que un viaje salga perfecto conviene tener en cuenta varios puntos. Ya en otra entrada comenté, con ejemplos vividos,  las ventajas de alojarse en lugares céntricos, o prepararse con guías y planos el camino a los lugares que quieres visitar, sobre todo si vas a patear las grandes ciudades, como a mi me gusta hacer. Podríamos añadir  que según el lugar donde vayas habrá un momento adecuado para hacerlo. En general, mayo y octubre son meses perfectos para viajar. Si no tienes más remedio que viajar en verano, he podido comprobar por mi misma que Escocia o Noruega son lugares perfectos para ir en verano. Lo que no se puede hacer es viajar a India en época de monzones o a Cuba en época de huracanes. Y si lo haces, después no tengas la desvergüenza de quejarte o, como oí a unos españoles que por uno de esos huracanes que barren el Caribe como un reloj todos los años, llevaban varios días sin poder salir de la habitación del hotel y EXIGÍAN que el Gobierno español enviara aviones militares a "rescatarlos".

Por eso, cuando se me ofreció la posibilidad de volver a Grecia, esta vez con un amigo, 16 años después, le puse como condición que fuéramos aprovechando los días navideños. Y por eso aparezco ante la puerta de los Leones con una parka y guantes, aunque sin una muralla de gente delante.

Lo de la parka tampoco es que fuera necesario cada día del viaje. Sólo cuando había que salir muy temprano  o para ir a Delfos, que está en la montaña, me la puse. Del primer viaje tengo fotos dando una vuelta por el puerto de Egina con una chaqueta muy ligera de ante mientras que mi hermano está en manga corta, con un polo blanco y con el jersey atado a la cintura.